domingo, 13 de marzo de 2022
Mr Zelensky
La energía surge desde el centro del pecho. Posiblemente sea ahí donde se aloja el alma del pequeño hombre del que está pendiente el planeta entero. Cerebro, brazos, piernas, voz, todo está a las órdenes de ese magma irreducible que brota cada vez que habla. Desde ese lugar surgen las palabras hechas de hierro. No hay un milímetro de debilidad, y sí toneladas de determinación, optimismo, y coraje. Si mostrara la esquina de alguna duda, si lo hiciera, dejaría caer las ruinas, y las ruinas ahora son el símbolo de la resistencia. El país y sus millones de historias cruzan el umbral de una sola persona que habla directamente al mundo entero, una voz que se parece a todos los tiempos de la historia. Él y sus espartanos protegerán esas Termópilas mientras el resto observamos en la contradicción del alivio por no estar ahí, y la sensación de no que nada bueno acontecerá mientras el mundo no sea uno solo. El héroe de la historia lleva muchos días sin descansar. Avanza, mirando los flancos para que el bloque en el que ha convertido a su población no se disperse. Carne y hueso, acero y corazón. Ha sabido la razón por la que siempre persistió, cómplice de las cámaras y del humor, y ahora cómplice en el sufrimiento sin sentido. Sin pedestales ni garantías, y con la tenebrosa sombra cerniéndose sobre él y sobre su gente, libra cada día una batalla que, en realidad, ya ha ganado. El resto miramos. Y con suerte, recordaremos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario